lunes, octubre 10, 2011

el capitulo acerca de la importancia de ser importante

no soy dramático, creo!
hoy fue mi primer dia a prueba en el canal estatal. volvi a cn3, pero esta vez con una oferta mucho mas concreta, aunque no muy esperanzadora y de lejos alentadora. me propusieron que sea camarografo. la camarografía es un arte muy mal comprendido donde entran solo los periodistas probos con la vocación de taxista. la verdad es que no me ilusiona para nada haber pasado por la u, haber leído como quinientos libros ((o casi)) para terminar como camarógrafo. es que los camarógrafos son el equivalente al taxista o busetero del mundo periodístico. pero igual, me toca tragarme el orgullo porque, por lo menos, esta es ya una oferta mucho más concreta que las vaguedades del quién sabe, a lo mejor, quizás algún día te contratamos de reportero con que me endulzaban mi jefa y el jefe de mi jefa y el jefe del feje de mi jefa.
se supone que en un mes adquirirán un nuevo equipo de camarografía, eso incluye un vehículo y una licencia de conducir ((esto último corre por mi cuenta)). si para entonces yo ya he asimilado todos los conocimientos de mis compañeros camarógrafos ((saber los secretos del enfocar, hacer ángulos adecuados y picadas, tomar imágenes con los filtros correctos, desentrañar los secretos de la contraluz y sobretodo dar codazos y puntapiés y una que otra puteada para poner la cámara en las narices de la estrella burócrata del momento no me suena tarea muy facil que digamos)). digamos que hay que ser bien chucha para pasarse por encima a los demas camarógrafos de las otras estaciones televisivas en medio de la rebatiña del yo le pude primero la cámara. no me hace ilusiones ser camarografo. sin embargo, lo que si me desmoralizaría es que ella, mi jefa, contratase a un reportero para que yo sea su camarografo... eso si sería la cagada. en fin, si algo he aprendido hasta ahora es que mis facultades adivinatorias son muy malas. y la mayoría de veces cuando he dado por sentado una verdad definitiva, siempre ocurre algo que rompe el esquema y vuelve a replantearme la cualidad del asunto que tengo en frente. solo espero en este momento ser excesivamente dramático e hiperrealista. sobretodo con la posibilidad ya cantada de mi jefa que no solamente me tocara ser camarógrafo, sino periodista emergente, o sea, que me tocara editar mis propias notas grabadas. si es asi ((insisto, es así como me dijo que seria mi jefa)) estoy dispuesto a aceptar el reto, sino, no lo sé. a lo mejor digo, no vale la pena abandonar mis libros, mi tiempo y mi libertad por esto, por ser un busetero del periodismo.